Gobierno de Dina Boluarte evalúa negar el ingreso de Evo Morales a Perú 3ozu
Dina Boluarte, presidenta de Perú, pidió al expresidente de Bolivia, Evo Morales, que deje de intervenir en los asuntos internos del país y dijo que las autoridades migratorias evalúan la posibilidad de negar su ingreso al territorio nacional. 732m49
Durante una intervención en el canal virtual peruano PBO, la mandataria manifestó que está hablando con la oficina nacional de Migración para evaluar la situación del exmandatario, dada su injerencia en la crisis del país.
“Estamos conversando para que, dentro de ese contexto, veamos la situación de ingreso del señor Evo Morales al país porque creo que nadie, ninguna persona, ningún expresidente ni un líder de otro país tiene por qué intervenir en temas internos", indicó la gobernante.
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Asimismo, Boluarte señaló que, si “Morales quiere seguir siendo líder allá en Bolivia, pues en Bolivia tiene que ejercer ese papel de líder social y líder político".
Tras las actividades desarrolladas por Evo Morales en el sur del Perú, varios legisladores peruanos de ambas bancadas pidieron a la Cancillería que tome medidas diplomáticas contra el expresidente boliviano.
"No podemos permitir que venga al Perú a levantar a las masas para que se separe parte del territorio nacional", sostuvo ante la prensa el congresista del Partido Renovación Popular, Jorge Montoya.
Morales, aliado del destituido Pedro Castillo, es acusado por los parlamentarios de alentar las manifestaciones en contra de la nueva presidenta de Perú.
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Durante la noche del miércoles, el ministro de Defensa, Jorge Chávez, informó que se detectó en Puno (sureste) a cinco ciudadanos bolivianos que estaban "incitando" a los manifestantes. Y agregó que las actividades llevan varios días desarrollándose en el país.
Las manifestaciones en Perú se reiniciaron el pasado 4 de enero para exigir la renuncia de Boluarte, el cierre del Congreso y la convocatoria inmediata a elecciones tras la destitución de Pedro Castillo.
Las mayores protestas se registran en regiones del centro y sur del país, donde el destituido Castillo, un maestro rural de izquierda, tiene mayor respaldo de la ciudadanía.
