La inusual definición de unas votaciones a una alcaldía en Sudamérica: hubo empate y se definió por sorteo 6c2a36

Las votaciones a alcalde de una pequeña localidad de Uruguay terminó con una curiosa e inusual definición que le da la vuelta al mundo. 105f7
Diez días después de que el conteo de las elecciones regionales provocara asombro por haber terminado en empate, las autoridades optaron por dejarlo a la suerte y definirlo por sorteo.
Una urna naranja en la que se depositaron dos sobres con los nombres de cada candidato fue la protagonista del inusual acto democrático.
Las autoridades de la Corte Electoral actuaron como garantes de la instancia que otorgó la alcaldía de San Bautista, a unos 63 kilómetros de Montevideo, al candidato del Partido Colorado, Joaquín Farina.
Roberto Siriani del Partido Nacional, también de centroderecha, fue quien no logró quedarse con el cargo.
"La suerte nos acompañó en esta oportunidad. Era lo que habíamos soñado y aspirado", dijo Farina al medio local Subrayado.
Para agregar más curiosidad, el nuevo alcalde contó que pudo haber ganado por tres votos, pues su padre faltó a la votación junto con otros dos amigos a causa de un viaje que demoró más de lo previsto.
"Fueron tres votos menos, que supuestamente nos iban a acompañar", contó Farina, aliviado tras el sorteo que lo benefició.
El domingo 11 de mayo, Farina y Siriani empataron con 857 votos en unos comicios en los que competían bajo el ala de la Coalición Republicana.
Los comicios departamentales y municipales confirmaron al Frente Amplio (FA, izquierda gobernante) en las intendencias (gobernaciones) de la capital Montevideo y Canelones, los dos departamentos más poblados del país.
La istración de los otros departamentos (provincias) quedó en manos del Partido Nacional, con excepción de Rivera, en la frontera con Brasil, que se mantiene en manos del Partido Colorado y Salto, limítrofe con Argentina, que quedó en manos de la Coalición Republicana.